Yo soy Don Quijote de la Mancha

Ayer fui al Teatro Español a ver la obra "Yo soy Don Quijote de la Mancha", protagonizada por José Sacristán. No se trata de  un Quijote épico teatral, sino de una reflexión sobre el "caballero de la triste figura", un viejo medio lunático que, sin embargo, persigue el ideal más cuerdo de todos, la bondad. Por ello  se hace caballero andante, para defender a los necesitados, acompañado por el buenazo de Sancho, su humilde escudero tan apegado a los valores terrenales como su amo a perseguir estrellas.
En estos tiempos tan tristes necesitamos pensar que todavía existe bondad. Como decían en la obra,  justicia justa, alcaldes que no roban...
Os dejo la nota que daban con el programa:

Lo explica muy bien – como todo – José Antonio Marina: el mejor invento de la especie humana es la bondad. Es difícil, claro, la bondad, pero si no esperásemos que fuera posible de vez en cuando, no querríamos seguir viviendo. Por eso, en este nuevo siglo cambalache seguimos necesitando a Don Quijote. Porque necesitamos creer: que hay locos capaces de soñar que pueden ayudar a los otros y que eso vale la pena; que hay cuerdos tan limpios que son capaces de ayudar a esos locos y de acabar soñando como ellos. Pensar desde La Mancha – este proyecto nace en los pensamientos de la directora del Festival de Almagro – esta aventura universal que estremece a personas de cualquier lugar del mundo. Seguir al alucinado Alonso Quijano en su mirada a un mundo que en su cabeza se ordena con palabras viejas y hermosas como lealtad, justicia y amor verdadero. 

Don Quijote es una parte de todos nosotros. Es un miembro de nuestra familia. Forma parte de lo mejor de nosotros, de nuestra parte buena. José Sacristán tiene también un huequito en nuestra memoria sentimental, en nuestros recuerdos, desde algunos más lejanos hasta algunos muy, muy recientes. Nos pide que le ayudemos a buscar la bondad. Que le ayudemos a ser Don Quijote. 

Pretendo que Yo soy Don Quijote de la Mancha respire y recuerde ese Don Quijote que forma parte de nuestra memoria y de nuestros deseos. Por eso no me alejo de la historia, por eso voy a utilizar miles de palabras de este libro y voy a tratar de que las mías sirvan para unir esos recuerdos que nos unen a todos. Don Quijote tendrá la compañía de Sancho y de su hija Sanchica: dos personas sin maldad, capaces de ver en Don Quijote al loco y al hombre bueno, capaces de entender que el mundo necesita a Don Quijote. Sin duda: necesitamos a Don Quijote. 

José Ramón Fernández

2 comentarios:

  1. Mira que por haber estudiado la asignatura de literatura en un instituto manchego me han podido hablar un rato del Quijote, y no recuerdo que se hablara de la bondad del personaje. Imagino que por tener un delirio, y, por tanto, ser tratado de loco, todo lo demás quedaba en la misma cesta. Hasta su bondad. Quizá de Sancho sí se dijera, pero en este otro caso, el cesto de tonto era el que se comía lo de dentro. Nunca entendí por qué la hora de Literatura no la dedicábamos a leer. Así me hubiera leído el Quijote.

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    1. Además aprendí que muchos de nuestros refranes populares viene del Quijote, o por lo menos han pervivido gracias a él.
      Mira: http://www.refranerocastellano.com/refran3.htm

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